Es el núcleo más antiguo de los que se localizan en el entorno de
Siruela. La memoria de sus antecedentes romanos se conserva en el
nombre de "la ciudad de Minerva" que aún aplican los naturales. Su existencia está documentada en época árabe, de la que perduran restos de un castillo.
Tras la reconquistase integró bajo los templarios en la jurisdicción de
Capilla, y más tarde en las posesiones del Duque de Benavente.
En las inmediaciones de la población, sobre el punto donde al parecer
se levantó en la antigüedad un templo a Cibeles y más tarde una
basílica visigoda, se encuentra la ermita de Ntra. Sra. De Nazaret,
obra de notable arquitectura, con gran cuerpo y espadaña escalonada,
cuya silueta recuerda la de la iglesia vieja de Peñalsordo, sobre cuyos
muros lucen lápidas romanas alusivas a Miróbriga.